Las 5S como herramienta para reducir los riesgos laborales

Esther Enales | Directora de Gestión Cliente en IMQ Prevención

La seguridad, salud y bienestar ocupacionales son un aspecto absolutamente estratégico en las compañías, pues como es sabido, deben ser objetivo y compromiso inexcusable y de pura lógica, pues su activo más importante es el capital humano con el que cuentan. Promover la toma de conciencia sobre la importancia de dichos objetivos resulta indispensable para garantizar el óptimo desarrollo de las empresas y del conjunto del tejido productivo, así como la Mejora Continua. El enfoque se dirige a lograr políticas de empresa saludable, en las que haya una participación del personal activa, cooperativa y eficaz.

Sin embargo, el resultado actual de la prevención de riesgos laborales sigue teniendo un alto coste para las personas, las organizaciones, y la sociedad: accidentes laborales y enfermedades profesionales siguen ocurriendo y cada año se incrementan. En ellas, condiciones y actos inseguros son características que determinan las causas de los daños para la salud. No existen excusas que justifiquen esta situación.

El binomio persona y siniestralidad supone un reto contra el que hay que establecer normas, y para ello es importante que haya tolerancia cero hacia los accidentes, las enfermedades profesionales y las causas raíz que los originan.  Como objetivos estarían el incremento en satisfacción de las personas trabajadoras, y lograr ser empresas socialmente responsables.

La legislación y normativas en la materia, muy abundantes, nos ofrecen pistas de cómo debemos actuar para conseguir los propósitos anteriormente citados. Pero a veces, necesitamos la ayuda de metodologías contrastadas para tener éxito y concentrar de forma mas eficiente los esfuerzos. Una de estas metodologías es el de las 5S, técnica de amplia difusión, pues son numerosas las organizaciones que lo utilizan, principalmente empresas industriales. Es una metodología estrechamente relacionada con el orden y la limpieza, aspecto que las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo establecen de forma muy concreta; en consecuencia, es indiscutible la relación de las 5S con la seguridad y salud ocupacionales. Y es que, además es una metodología eficaz, sencilla de aplicar, económica y de aplicación ágil. Pero para conseguirlo es necesario que exista voluntad por parte de quienes dirigen las organizaciones, junto con la participación de personas trabajadoras.

Pero, ¿Qué son las 5S?

Como se ha dicho, es una metodología relacionada con el orden y la limpieza, cuyos orígenes fueron una fábrica de la marca de automóviles Toyota, tras la Segunda Guerra Mundial, y el objetivo de los ingenieros que desarrollaron esta técnica era conseguir empresas más productivas, ordenadas, seguras y saludables. En definitiva, estamos hablando primeramente de la mejora en las condiciones de trabajo para que, como consecuencia, y en un entorno más seguro, el comportamiento de las personas sea favorable o menos inseguro.

Las 5S tienen cinco etapas, y las S corresponden a la inicial en japonés de las siguientes palabras:

  • Organización (Seiri): ganar espacio eliminando lo no útil o fuera de su sitio, o reparando lo que pueda ser nuevamente utilizado
  • Orden (Seiton): organizar el espacio con los elementos que son necesarios para el trabajo. Se facilita la tarea de encontrar cosas y evitar pérdidas de tiempo asociadas con la ocurrencia de accidente por prisas, o la manipulación incorrecta de objetos.
  • Limpieza (Seiso): mantener un espacio limpio ayuda a identificar defectos y fallos, así como averías de equipos que pueden ser fuente de accidentes
  • Estandarización (Seiketsu): normas y rutinas para mantener el grado de orden y de limpieza alcanzado en fases anteriores, mediante instrucciones sencillas y visuales, señalización, limitaciones, etc.
  • Disciplina y hábito (Shitsuke): fomentar y hacer esfuerzos para mantener las situaciones anteriores. Y también auditar o chequear para comprobar que las 5S se van automatizando.

Si nos ponemos en situación, ¿cuántos accidentes pueden asociarse a causas relacionadas con la falta de orden y limpieza? Charcos de aceite sin recoger o cubiertos con serrín, material de chapistería en el suelo con aristas corto-punzantes, herramientas desordenadas en cajones y sin clasificar, material en estantes sin ordenar, pasillos y otras zonas de paso invadidas por materiales, residuos sin clasificar, basura acumulada en el entorno de los puestos, suciedades en máquinas y equipos que no dejan ver averías potenciales o latentes…., son un ejemplo de situaciones no conformes habituales en las empresas. Pero no solo se trata de garantizar el orden y eliminar la suciedad, sino en integrar la limpieza como parte del mismo trabajo habitual. Y también, cambiar los hábitos relacionados con el comportamiento incorrecto por aquellos hábitos que son beneficiosos, para evitar el acto inseguro.

Estructurarse para implantar las 5S

Implementar esta metodología requiere reestructurarse y organizarse convenientemente en un proceso. Para ello, se requiere:

  • Designar un equipo de implantación, formado e instruido en la materia.
  • Seleccionar áreas en las que intervenir, seleccionando un área piloto.
  • Planificar la implementación, de forma estructurada
  • Reunión de lanzamiento
  • Panel 5S
  • Implementación
  • Difusión de resultados
  • Mejora continua

Documentar el proceso, el antes y el después, aprender de cada mejora, señalizar, difundir las ventajas de funcionar de otra forma, realizar visitas activas a los espacios de trabajo, actuar con rigor y diligencia, son herramientas necesarias para el éxito de la implantación. Pero ¡atención!, sin el compromiso de la alta dirección no habrá éxito. Y esto requiere creer, implicarse, facilitar dedicación y recursos, y permitir un ritmo constante, sin urgencias y prisas que resultan muy inconvenientes.

¿Por qué es beneficioso implementar las 5S desde la perspectiva de la seguridad y la salud?

  • Es una solución que ofrece resultados rápidos y eficaces.
  • Correcta distribución de elementos de trabajo.
  • No se derrocha tiempo buscando objetos necesarios para el trabajo, que luego generen prisa y consecuentemente accidentes.
  • Se mejora el mantenimiento de equipos e instalaciones, haciendo un uso responsable.
  • Se reduce la ocurrencia de accidentes al aflorar riesgos ocultos
  • Se facilita el trabajo en equipo al tener todas las personas el mismo hábito y un mismo sentido del logro.
  • Impacto visual agradable fomenta calidad, productividad y seguridad.
  • Se evita el caos y la desorganización
  • Se aumenta el control y las buenas costumbres, así como el respeto por las normas, al existir resultados
  • Se favorece la Cultura Preventiva.
  • Se minimizan despilfarro y los defectos, y los tiempos improductivos
  • Se ahorran costes que pueden reinvertirse, entre otros aspectos, en la Seguridad y Salud.
  • Se reduce el estrés y se gana en motivación
  • Aumenta la satisfacción de las personas
  • Mayor orgullo por el trabajo que realizamos
  • Mejora de la imagen de empresa

Es un hecho constatado que las empresas que han implantado de forma correcta esta metodología han conseguido los beneficios antes citados. Una buena combinación de bajos costes y resultados rápidos es lo que tradicionalmente se ha buscado en calidad y productividad, y por lo tanto, las seguridad y la salud no iba a ser menos.

Animo desde aquí a que las empresas que aún no han implantado esta metodología trabajen en ello. Quizás puede ser conveniente concentrar una prueba de ámbito limitado para comenzar de forma sencilla y ver los resultados. Ello facilitará el éxito de la implantación, venciendo así los recelos iniciales y la mas que posible resistencia al cambio.

842 428 IMQ
Buscar...